El Lago Tonlé Sap de Cambodia está ubicado muy cerca de la ciudad de Siem Reap. Lo podría catalogar como uno de esos lugares “extraños”, fuera de lo común, que invitan a ser visitados y que, seguramente, te sorprenderá.Dicen que hay miradas, gestos o imágenes que pueden valer más que mil palabras. Por esa razón este Relato Viajero no tendrá tanto de relato sino más bien de Fotos con palabras, porque ellas se encargarán de contarte mucho más que yo sobre este lugar.
Nuestro guía nos pasó a buscar por el Hotel en donde estábamos alojados y salimos rumbo hacia lo desconocido. Obviamente sabíamos lo que íbamos a visitar pero nunca nos imaginamos que este lugar formaría parte de nuestra “gran experiencia viajera”. Resultó asombroso ver que tanta gente, comunidades enteras que conforman lo que nosotros conocemos como “barrios” viviendo durante toda su existencia, literalmente, sobre el agua. Se las conoce como “aldeas” o “pueblos flotantes” que además cuentan con hospitales, escuelas, en fin, con todo lo que la gente necesita para vivir.
El recorrido previo antes de llegar al Embarcadero del lago Tonlé Sap fue maravilloso porque nos mostró parte de la vida fuera de Siem Reap, tan solo a 15 kms. al sur.
Bajamos hasta la orilla del Lago y vimos que nuestro bote nos estaba esperando, era solo para nosotros. Precario como casi todos los que estaban allí y con el que esperaba no naufragar.
Un poco de conocimiento no viene mal, no? Te cuento que el río Tonlé Sap nace en el lago Tonlé Sap, es la mayor masa de agua del sudeste asiático y es una de las mayores reservas de pescado de agua dulce del mundo y que muere en el río Mekong. El lago Tonlé Sap tiene una extensión de 2.590 km² y puede llegar, increíblemente, hasta los 13.000 km² durante la estación húmeda, de lluvias. Nosotros estuvimos allí durante la época “seca”. Para entender un poco el porqué del aumento de su caudal hay que saber que existen dos ríos, el Mekong en Cambodia y el Nilo en Egipto que, por el gran caudal de agua que recogen en la temporada de lluvia, pueden invertir su curso. Esto lo hacen cuando los mares en donde desembocan no son capaces de aceptar tanta agua junta, porque su desembocadura es pequeña. En este caso puntual, el agua que el Mekong no puede desagotar en el mar se escapa hasta el Tonlé Sap y, por esa razón, aumenta el lago considerablemente su tamaño.
En la foto verás a nuestro guía señalándonos el río Mekong para que podamos entender mejor todo lo que nos contó.
Sin más explicaciones subimos al bote y el guía dio la orden al conductor para que, por fin, salgamos a recorrer el lago. ¡¡Partimos!!
Gracioso fue ver que en el camino, debido a que era época seca, como las barcas pasaban muy juntas unas de otras, casi nos podíamos tocar.Una de las preguntas que le hice a nuestro guía fue ¿quienes vivían en esta zona?¿Quienes habitaban este lugar? Nos dijo que aquí casi no viven los cambodianos y, si los hay, son unos pocos. La mayoría de los habitantes de este lugar son de origen vietnamita y chino.
Un dato increíble es que el lago Tonlé Sap provee más de la mitad del pescado que se consume en Cambodia. Es un recurso natural muy importante para la comunidad.
Nos dirigíamos a la aldea llamada Chong Khneas, el pueblo flotante que está casi en el borde del lago y es el más cercano a Siem Reap.
A medida que llegábamos divisábamos más y más casas flotando sobre el Tonlé Sap. Todas, la gran mayoría, muy frágiles. Resultaba asombroso verlas y más difícil aún entender como se mantenían en pié.Todas las casas que vi acapararon mi atención pero hubo una que me sorprendió más, una escuela. Pero sobre todo me asombró la manera en que uno de los alumnos llegaba hasta ella, agarrándose con fuerza de sus paredes, abrazándose a ella.
Además de las casas, sus habitantes me resultaron especiales y particulares. Me impresionaba todo a cada instante, ni mi vista ni mi cámara daban abasto para captar todo lo que pasaba a mi alrededor.
Una de las paradas que hicimos durante este recorrido fue para conocer un criadero de cocodrilos. Es un animal que no me cae simpático pero que por allí abunda. Lo bueno de parar allí fue que desde su terraza tuvimos una vista privilegiada de la aldea y aprovechamos también a tomar una gaseosa.
Ya el recorrido llegaba a su fin, habíamos conocido la aldea Chong Khneas que se mantiene a flote sobre el lago Tonlé Sap. Habíamos visto como transcurría la vida de esa gente que se desplaza sobre sus aguas y allí descubrimos, simplemente, una manera distinta de vivir.
No solo los Templos de Angkor en Cambodia me sorprendieron sino que también su lago Tonlé Sap lo hizo.
Este post que comparto con vos lo hice por pedido expreso de Alfredo, mi compañero de vida y de viajes. Quedó tan subyugado al conocerlo que quiere que el Tonlé Sap tenga un lugar en mi Blog para que se los pueda mostrar a ustedes. Pero además también quiero dedicárselo a todos los que viven allí sobre sus aguas.Si llegaste hasta aquí quiere decir que te intereso este lugar de nuestro mundo, por eso quiero invitarte a que navegues un rato conmigo por el lago Tonlé Sap.
Gracias por acompañarme en este Relato con Fotografías Viajeras.
Y te pido un favor, anímate a dejar tu comentario,
me interesa saber tu opinión. Gracias.
Cristina
Liliàn estuve ahí y también quedé asombrada por ese particular modo de vida.
Muy bueno tu relato, me aportó datos que se me habían pasado.
Sofy
Increíble manera de vivir. Verdad?
Muy hermosas tus fotos Lilian. Y lindo como siempre la forma de compartirlo. Y gracias porque cuando te leo siempre aprendo algo nuevo.
Lindo año 2017 para ti y toda tu familia
jordi (milviatges)
Que buenos recuerdo del lago y de todo el país. Nosotros también estuvimos recorriendo los poblados flotantes y, aunque es verdad que lo amenizan con un recorrido turístico, es así como han estado viviendo durante siglos, por lo que lo considero muy interesante.
Un beso y feliz año!
Carmen
Hola Lilián, me ha encantado descubrir una manera de vivir tan diferente a lo que conocía, excelente relato e increíbles fotos.
Un abrazo
Carmen
Kris
Me ha parecido un lugar singular, no de esos que podemos decir que son bonitos, pero si de los que nos dejan la sensación de habernos acercado a la realidad de la gente que allí vive (que mira tú que gracia que no sean precisamente camboyanos). Un abrazo fuerte.
Susana
Genial relato Lilian!! Tambien lo visité y quedé asombrada y maravillada de como esas casitas se mantienen en pié y soportan las lluvias! Una vida sin duda sacrificada. Besos!!!
Paco Martinez
Cuánta precariedad y cuánta manufactura. Todo está hecho y amarrado a mano… En la foto en que pasáis casi rozando el otro bote, seguro que has salido en las fotos que hacen a la inversa. Intercambio fortuito de fotos, de caras, que no conociéndose, se cruzaron un segundo en la vida, haciendo lo mismo, viajar, conocer, fotografiar, saludar, sonreír… Me parece bonito.
ely
HOla, tambien fui alli en la epoca seca y me tome una gaseosa en ese mismo lugar de cocodrilos donde , ademas, podias deleitarte con un plato tipico con su carne.
Mmmmm , algo para pocos
Muy lindo que hayas publicado de este lugar
Lilián Viajera
Ely,
Que bueno que pudiste disfrutar de este lugar! Realmente es maravilloso y sorprende.
Nos alegra saber que te agradó nuestro Relato Viajero!!!!
Un abrazo y muchas gracias por dejar tu comentario en nuestra web.
Lilián y Alfredo